Como Mujeres sabemos apreciar una buena obra, una buena vasija y su pulcra terminación. Pero toda vasija debe ser procesada larga y detalladamente para ser elogiada por los ojos y tomada en las manos de Aquel que la quiera adquirir para un uso específico.
Así es tu vida Preciosa Mujer de Dios; de niñas anhelamos un futuro pincelado con nuestros deseos y espectativas, pero con el tiempo si nos ponemos en las manos del Todopoderoso Dios, El mismo pone un sin fin de situaciones en nuestro diario andar para procesarnos y darnos un Destino Escrito por El mismo en nosotras.
Nos toma en sus manos, nos quita las impurezas e imperfecciones, nos da forma, nos deshace si no le agrada a Sus ojos y nos vuelve a hacer. Nos introduce al fuego para recibir el cocimiento y tras soportar la altas temperaturas, salimos como vasija perfecta creada por el mejor Alfarero, El Maestro.
No nos quejemos por las circunstancias adversas que a veces nos toca vivir, aprendamos mas bien en ellas de callar mientras soportamos las pruebas, porque de seguro con Dios llegaremos a entender el sentido que El pone en nuestras vidas con ellas.
El profeta Jeremías fue enviado por Dios mismo a casa del Alfarero y Dios empezó a hablar a su Espíritu, mostrándole, que asi como se deshacía el barro en las manos del artífice, nuestras vidas pueden deshacerse cuando El lo determine. Prosiguió y le dijo: ¨ Pueblo de Israel, acaso no puedo hacer con uds lo mismo que hace este alfarero con el barro? afirma el Señor, Uds pueblo de Israel, son en mis manos como el barro en las manos del alfarero. En un momento puedo hablar de arrancar, derribar y destruir a una nación o a un reino; pero si la nación de la cual hablé se arrepiente de su maldad, tambien yo me arrepentiré del castigo que había pensado infligirles. En otro momento puedo hablar de construir y plantar a una nación o a un reino. Pero si esa nación hace lo malo ante mis ojos y no me obedece, me arrepentiré del bien que había pensado hacerles¨. Jeremías 18:6-10
Amada; que te parecen estas palabras llenas de Autoridad y Determinación de Nuestro Creador?... Duras, pero con una buena dosis de cuidado hacia Su Pueblo, o sea Tú. Es mi deseo que te mires como la obra de Arte más fina en las Manos de Aquel que hace todo Perfecto por el Beneplácito de Su Voluntad. Que te dejes moldear, que te dejes deshacer, que El con las circunstancias tan hostiles que vives quite toda impureza de tu vida y puedas ser elogiada por aquellos que te aman, porque vieron en tí, un CAMBIO que solo Dios logra alcanzar.
