Por motivos de trabajo mi esposo tuvo que ir a trabajar a un área de desastre, generado por un huracán. Mi preocupación y angustia se activaron de tal manera que primero confié en Dios, pero de igual forma trate de informarme por todos los medios de todo lo relacionado al mismo, a la zona en cuestión, y estaba pendiente de todos los informes... tras ver fotografías de aquellas ciudades, sitios y los árboles como eran arrancados de cuajo, leí entre otras cosas que las raíces de los pinos son tan superficiales, aunque se los viera tan robustos e imponentes. En cambio las raíces de los robles son profundísimas y fuertes que los hace tremendamente resistentes a todo desastre climático.
Esto, inmediatamente me llevó a pensar... que clase de raíces espirituales necesita una familia hoy por hoy? Considero que si queremos los padres ser líderes inconmovibles para nuestros hijos, de modo que nos parezcamos al roble, necesitamos tener raíces espirituales como las de los robles.
Si tu estas de la mano con tu esposo en el día a día frente a las tormentas de la vida; o si eres una mujer sola que hace de padre y madre a la vez, y no te escapas de los huracanes que la vida trae consigo, necesitas crecer en fe y convertirte en una robusta discípula de Cristo.
Jesús mismo dijo...¨Si permanecen en mí, yo permaneceré en ustedes. Así como ninguna rama puede dar fruto por sí misma, sino que tiene que permanecer en la vid, así tampoco ustedes pueden dar fruto si no permanecen en mi. Yo soy la vid y uds. son las ramas. El que permanece en mí, como yo en él, dará mucho fruto; separados de mí no pueden ustedes hacer nada¨. (Juan 15:4-5).
Lo que Jesús nos quiso dar a entender con esto es que existen disciplinas espirituales de probada eficacia que si las ponemos en práctica nos ayudarán a convertirnos en verdaderos robles espirituales que no sucumben a los ciclones.
La Oración, el estudio constante de la Palabra; la Adoración, Dar y Servir en todo tiempo, Comunión intensa en el hogar y el testimonio de vida diario que desarrollemos crearán un perfil que califique para convertirnos en esos robles en el Espíritu.
Seamos Verdaderos Amigos en el hogar, y mantengamos Vidas Auténticas, ya que ahí es difícil mantener un fachada por largo tiempo. Seamos auténticos, pongamos en práctica todas las enseñanzas que nos enseña el manual de Vida (la Biblia), ya que de esa forma, existen discipulitos que nos observan que entenderán que SER CRISTIANOS, NO ES CARGAR UNA RELIGION SINO UN ESTILO DE VIDA.
Así que Mujer, aunque convertirse en robles espirituales cueste, y se tome tiempo......cuando lleguen las tormentas y huracanes de la vida, las raíces que toda tu familia, tú, tu esposo y tus hijos, forjaron, no habrá situaciones de desastre que lo conmueva. Manos a la obra! Influye en tu familia, y en tu alrededor a convertirse en Arboles de Justicia...del cual habla Isaías 61:3.